viernes, 19 de noviembre de 2010

¿Una propuesta indecente?

Veamos un  destacado financiero, intelectual y académico de una de las universidades más importantes del país anuncia su candidatura por uno de los partidos mas sólidos de lo que queda del sistema de partidos políticos peruano. A través de diferentes medios de comunicación anuncia su intención y se aboca a una fuerte inversión publicaría para lograr adhesiones a su candidatura. Todo dentro del ámbito de lo normal y hasta refrescante dado que la mencionada institución, el Partido Popular Cristiano viene de una inesperada derrota en su propia plaza fuerte, la capital del Perú y requiere a gritos de un nuevo liderazgo. Un hombre en busca de un partido y un partido en busca de un hombre, la receta perfecta para al menos intentarlo; pero.....

En primer lugar el autoproclamado precandidato no pertenece a las filas del partido en mención, la pagina web de otro partido anteriormente ligado vía una alianza electoral al movimiento por el que nuestro gracioso precandidato pretende postular, anuncia que el mencionado  caballero sigue perteneciendo a sus filas y por tanto no estaría en condiciones de presentarse formalmente a la soñada candidatura.

En segundo lugar el mismo secretario general de la organización en mención, rechaza las maneras en las que el precandidato se ha pretendido acercar a la institución auto proclamándose como pre-candidato y sin pasar por los controles internos.

En tercer lugar, increpado sobre su actitud el precandidato responde que tendrán que expulsarlo antes de que desista de su precandidatura ¿Cómo puede ser expulsado quien no es integrante de una organización?, ¿Qué fue primero la gallina o el huevo?

Un cuarto punto ¿Qué dicen las bases? Las bases callan en siete idiomas al menos de momento. Algo se sabe sobre la existencia de una corriente reformista al interior de la mencionada organización que rechaza los intentos de la cúpula por sellar una alianza con un expectante candidato presidencial y optaría por la ruta de un candidato propio ¿Estarían dispuestos a apoyar al recién llegado? Todo es silencio.

A estas horas mi estimado lector se habrá dado cuenta de que me refiero a la telenovela vivida entre el ¿precandidato? Daniel Córdova y el Partido Popular Cristiano que ha devenido en uno de los incidentes más confusos de los últimos meses dentro del berenjenal de la política peruana.

A primera vista la intención de Dante Córdova de incursionar en política podría marcar un renacer de esta actividad en la sociedad peruana, se trata de un profesional exitoso, un académico e intelectual de gran prestigio y un técnico competente. Que dicha intención se formalice además en el seno del PPC una institución de bien ganado prestigio y que ha salido debilitada tras su última derrota electoral en Lima donde incluso arriesgo la carrera electoral de su actual lideresa, es en si mismo algo bueno para el sistema político peruano, salvo por las formas en que se da y no debemos olvidar que en política a menudo la forma es el fondo.

A decir de muchos que toman en cuenta la trayectoria profesional del precandidato Córdova, este habría intentado en su forma de acercarse al PPC una iniciativa de compra hostil de la marca de la mencionada agrupación y a ello respondería su agresiva campaña de aparición en los medios y los ostensibles gastos en los que ha incurrido para publicitarse. Ahí yo veo un error, la política no es un campo donde prime lo económico, es más bien un campo que a menudo trata de primar sobre el anteriormente mencionado y se mantiene con sus propios reglas y modos de organización.  Si bien es cierto que la suerte suele ayudar a los audaces, la audacia en política tiene sus formas a menudo pausadas de expresarse, lo político es un mundo donde la fría racionalidad se entrelaza con los apasionamientos y los egos de sus protagonistas, algo que por lo general los cultores del independentismo político y los aspirantes outsiders por lo común acostumbrados a racionalizarlo todo desde un costo-beneficio con funcionalidad económica no suelen o no quieren entender.

Mirado desde fuera y teniendo en cuenta el valioso precedente de la candidatura de Mercedes Araoz por el Partido Aprista Peruano, una eventual candidatura de Daniel Córdova o de cualquier otra figura independiente o hasta uno de sus cuadros con menos exposición mediática seria una interesante apuesta para un PPC que parece estar ya encarando el agotamiento del ciclo de Lourdes Flores Nano como su principal locomotora y lideresa, no obstante hasta el momento la cúpula pepecista parece muy poco interesada en innovar y dar salida a sus nuevos cuadros mientras ve con manifiesto deseo la posibilidad de acercarse a la candidatura de Luis Castañeda y su partido Solidaridad Nacional.

Para terminar el devenir de la novela entre el precandidato, Daniel Córdova y el PPC puede ser interpretado como un capítulo más de la crisis de los partidos en el Perú donde ahora vemos que los partidos también pueden ser víctimas de intentos de adquisición y hasta invasión cual como si de terrenos abandonados se tratara. En esa coyuntura alguna instituciones de adaptaran y otras simplemente estarán condenadas a desaparecer como de hecho es de esperarse en un ambiente político tan convulso como el peruano. La pregunta de rigor es hasta cuando durara esto y hasta que tanto podremos soportarlo sin que afecte a otros campos de nuestra vida social.

lunes, 1 de noviembre de 2010

¡SOLIDARIDAD!


Hay cosas que son indignantes, que alguien sea condenado por ejercer su derecho a la libertad de expresión es una de ellas y mas en un régimen que se enorgullece de hacerse llamar demócrata. Por eso desde estas pequeñas lineas toda mi solidaridad con el afectado.

http://frikis.pe/8378/sentencian-a-blogger-peruano-a-3-anos-de-carcel/

Comentario sobre las alianzas electorales en la escena previa a las elecciones 2011

Aunque todavía la ONPE todavía no termina de contar los votos para proclamar a la próxima alcaldesa de Lima, la escena preelectoral con miras al 2011 ya comienza a calentar con miras a las próximas alianzas preelectorales. Ya varias organizaciones comienzan a anunciar sus intenciones de intenciones de acercarse entre sí a fin de unir sus plataformas con el objetivo de maximizar sus posibilidades en la próxima contienda del 2011.

Aunque es común que el publico peruano vea las alianzas entre organizaciones con fines electorales una forma mas de organizar la repartija del poder y sus beneficios entre una clase política desprestigiada, esto no tiene porque ser necesariamente cierto.

Contra el sentido común mayoritario la existencia de coaliciones en nuestro sistema político podría ser el mecanismo a través del cual el archipiélago de organizaciones actualmente existentes se vaya consolidando paulatinamente hacia los clásicos tercios: izquierda-centro-derecha en que se ha organizado clásicamente nuestro sistema político durante la segunda mitad del siglo XX o mas aun hacia el sueño de una sociedad bipartidista.

En una perspectiva optimista, una coalición o  varias, significa que existe al menos un núcleo de una clase política que sabe deponer sus ambiciones de maximizar su beneficio y con una capacidad de análisis y acción pragmática que le permite calibrar sus posibilidades para unirse a proyectos más grandes y con mayores posibilidades. Esto último es especialmente cierto en organizaciones como  Somos Perú, la Coordinadora Nacional de Independientes, Renovación Nacional, Acción Popular  o Fuerza Social cuya capacidad de pasar la valla electoral del 5% puede resultar un albur difícil de correr si es que desean sobrevivir en el ambiente político peruano post 2011.

Puede resultar extraño que una organización de tan larga data y trayectoria como Acción Popular se encuentre en las mismas condiciones que una como la Coordinadora Nacional de Independientes casi sin arraigo y con muy poca historia pero ello obedece a las contradicciones y escenarios de la política peruana que espero retomar en otras líneas pero no son parte de las preocupaciones del presente post.

Dos posibles alianzas nos deberían resultar particularmente interesantes. Por un lado la que se plantea entre la emergente Fuerza Social  y Perú Posible, con esta alianza el ex presidente conseguiría reeditar al menos en parte la coalición que lo llevo al gobierno en 2006 y situaría su propia organización, Perú Posible dentro del segmento de la centro izquierda tan descuidada por el partido aprista durante estos años.

En parte el toledismo intenta reeditar la estrategia de posicionamiento del accio populismo en sus etapa triunfales de moverse o bien hacia el centro o bien hacia el polo opuesto del aprismo. Por supuesto que  Perú Posible no es como organización algo comparable con lo que fue Acción Popular y tampoco Alejandro Toledo no tiene el genio ni el carisma de Don Fernando Belaunde  y por tanto requiere del eventual apoyo que la imagen y los cuadros de Fuerza Social le podrían brindar. Seria extraño que el toledismo requiera de otro aliado, es mas hasta le resultaría inconveniente a escala nacional pero muy necesario si se trata del ámbito regional donde esta visto que los dizque partidos nacionales no están en capacidad de llegar.

La otra alianza que merece analizarse es la que se podría dar entre el Partido Aprista Peruano (APRA) y el Partido Popular Cristiano (PPC).  Nos permite avizorar la sensación aprista sobre la imposibilidad de una victoria electoral y Lima y en el PPC sobre su debilidad fuera del ámbito capitalino, ambas organizaciones en estos momentos huérfanas de un liderazgo de nivel nacional dado que la principal carta aprista, Alan García, no puede intervenir en la campaña mientras que la lideresa pepecista requiere reenfocar su carrera política luego de su ajustada derrota en las recientes elecciones municipales.

Con una candidata como Mercedes Araoz y las dos maquinarias actuando coordinadamente la una en Lima y la otra al interior del país, sería una plancha con grandes posibilidades de victoria desequilibrando un escenario actual donde los dos candidatos con aspiraciones más serias para la segunda vuelta serian:  Keiko Sofia Fujimori y Alejandro Toledo, y donde la figura de una Lourdes Nano como cabeza de lista congresal en Lima avizoraría una respetable presencia congresal.

Aunque históricamente en trincheras opuestas el aprismo y el pepecismo han devenido en puntos de encuentro pragmáticos durante el presente quinquenio por lo que la mencionada alianza no resulta contraproducente y es natural que suscite el interés de las cúpulas en dos organizaciones que conocen muy bien sus escasas posibilidades de victoria en el próximo proceso pero que sin embargo juntas podrían hacer la gran diferencia ¿Aceptaran este acuerdo las bases apristas? Está por verse. Entre las bases pepecistas es de suponerse que no se encontraría tanta resistencia, la impronta del PPC parece ser mucho más programática que ideológica por lo que es de esperarse que un eventual acuerdo sea abordado menos de una forma ideológica y más en función de propuestas y posicionamiento.

¿Qué nos deja la campaña de alianzas que se ha iniciado? Particularmente la sola posibilidad de una alianza entre el APRA y el PPC  abre el horizonte de acuerdos programáticos y el alejamiento paulatino del escenario tan descaradamente confrontacional de nuestra política actual. No olvidemos que en el 2006 los voceros pepecistas denunciaban abiertamente haber sido víctimas del robo de la elección en primera vuelta por parte de los personeros apristas y hoy los jerarcas de ambas organizaciones se sientan civilizadamente a dialogar sobre un posible acuerdo entre ambas organizaciones.

Eso es política.......