La ley Hadopi en acción o como desanimar el surgimiento de la economía 2.0

Ya llega, falta poco tiempo así es a finales de junio del presente año la tan temida ley de los tres avisos o Ley Hadopi se hará realidad en Francia. El sueño de los promotores de una industria cultural aferrada a viejas prácticas, la pesadilla para los que diariamente navegamos en Internet y disfrutamos sus libertades, la amenaza manifiesta para la neutralidad de la red. Ya está aquí y se acerca con pasos amenazadores.

A los genios del gobierno francés no les basta con penalizar las descargas. Ahora quieren cerrar cada puerta disponibles para el ejercicio de la ética hacker ¿Cómo así? Un nuevo proyecto de ley permite que el usuario sea penalizado ya no solo por lo que descarga sino también si permite que alguien use su conexión para efectuar una descarga. Una pesadilla digna de 1984 y cualquier Torquemada de ocasión. La red es la oportunidad más grande para el ejercicio de la libertad surgida en la historia reciente y el germen de un nuevo paradigma tanto en lo económico como en lo social.

La vigencia de dicha ley en Francia tanto como la de Economía Sostenible o “Ley Sinde” en España así como las iniciativas similares en varios países significa un retroceso en cuanto a la neutralidad de la red y un atentado contra la privacidad de los usuarios que una sociedad basada en los cánones de la democracia no debiera permitirse.

En el conflicto probable entre derechos civiles y derechos económicos, son estos últimos los que deben ceder y readaptarse. Las libertades individuales son las que deben primar ante todo de no ser así la democracia se transforma en un simple remedo sometido al capricho de los poderes económicos.

Afortunadamente los usuarios de internet franceses no son mancos y de momento le llevan largamente la delantera a su gobierno y su inquisición cibernautica. Las direcciones y el tipo de archivos desde donde operan  sus operaciones de rastreo ya están hechas públicas a disposición de los usuarios que consecuentemente podrán evitarlos. En la internet el vigilante es el vigilado y como ya sabemos puede correr, pero no puede ocultarse.

Imagen: mistercorn