martes, 2 de febrero de 2010

El teclado más poderoso que la espada: la censura cubana a Internet

El mejor indicador de la calidad de un sistema de un gobierno y su solidez es la capacidad de soportar la crítica. El pensamiento disidente suele asustar a los sistemas que en el fondo se saben débiles en su fondo a pesar de toda la fortaleza que aparenten en su interior.

Los autoritarismos son débiles desde su inicio por más clamor popular que los rodee, por justas que se pretendan sus causas, por elevados que pretendan sus fines. Siempre necesitan una voz al oído o mejor cientos de voces recordándoles sus grandezas, aman las grandes proclamas de su verdad. Una voz en contra resuena como un rayo en medio del canto de sus áulicos, es la disonancia inaguantable en la grandiosa melodía que cree dirigir el mandón de turno y por ello debe ser acallada.

Aunque en palabras de Hugo Sanchez , la censura cubana a la internet sea cada vez un muro más fácil de saltar no por ello es menos reprobable, en especial para los hispano-hablante, porque la tenemos más cercana como el tufo de algún alien en el frente de nuestras propias narices.

Cabe destacar que de acuerdo a cifras alcanzadas por la opositora Comisión Cubana de Derechos Humanos y Reconciliación Nacional durante el 2009 se registraron al menos 869 detenciones arbitrarias de disidentes al régimen castrista. Muchos de ellos han sido adoptados por Amnistía Internacional.

Un país con 11,2 millones de habitantes donde solo el 14% de los nacionales tiene acceso a internet es sometido a férrea censura por parte de autoridades que miran a su población como niños o corderos a los que el gran hermano tiene que proteger a través de filtros de bloqueo de las páginas consideradas subversivas, liberándolas de lo que el viceministro de Informática y Comunicaciones, Boris Moreno, considera como "de contenidos nocivos como la incitación a la subversión del orden establecido en cuba”.

El sistema de represión de internet cubano es tan granítico que un informe de OpenNet, organización integrada por las universidades de Oxford, Cambridge, Harvard y Toronto excluye al gobierno cubano al igual que al de Corea del Norte por considerar que están mas allá de lo simplemente considerado como censura. En un gesto típico de su particular sentido de la tolerancia el gobierno de Cuba ha llegado a califica a internet como “la gran enfermedad del siglo XXI”.

Los blogs Generacion Y de Yoani Sanchez , desde Aquí de Reynaldo Escobar, esposa de la antes nombrada y el directamente confrontacional Potro Salvaje son la muestra ideal a través de los cuales se puede dar una mirada al universo blogeristico cubano. Hace algún tiempo en 2008, las autoridades de la isla feliz le negaron la autorización a Yoani Sanchez para asistir a la ceremonia del premio Ortega y Gasset en España por lo que esta se hizo acreedora al apelativo de la blogger cautiva ¿Qué temían?

El bloguerismo cubano existe en contra del deseo de las autoridades y gracias a una serie de astutas argucias de sus protagonistas que logran evitar la censura con la colaboración de muchos entusiastas de la libertad en el exterior. No es casualidad que los tres blogs mencionados en estas páginas se hallen alojados en un servidor de Alemania lejos muy lejos de la represión castrista.

Imagen: inti

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